<15> CUESTIÓN.
¿Cuál es la altura y anchura, la sublimidad y lo profundo (Ef 3,18) que deberían comprender los de Éfeso?
SOLUCIÓN.
Por esta altura se entiende la divina esencia, que no tiene principio ni fin, pues Ella misma no puede ser comprendida en ninguna ascensión de ninguna ciencia por su operación, que tiene un comienzo. Y por anchura se significa el poder infinito de Dios, que en nadie toma origen, y que actuándose no aumenta ni disminuye si no se ejerce. Y, ciertamente, por sublimidad ha de considerarse la claridad de la dininidad santa, cuyo brillar nunca tuvo comienzo y cuyo fulgor nunca pasará. Y por lo profundo se designa que, en esas tres mencionadas dimensiones, que están bajo su poderío y de ningún modo pueden hacerle resitencia, Dios combate contra el abismo del aquilón, y en su claridad están comprendidos todos los santos que le amaron y con Él se mantuvieron en la perseverancia buena de su ministerio con fe y obras.